
Uno de los grandes mercados para las muñecas eróticas realísticas es el mercado chino
No me engañas pues lo transmites toda vez que charlas. En tu forma de mirar, en tu forma de moverte… Se percibe esa confianza de no tenerle miedo a nada. De no tenerle temor a descubrir cosas nuevas. Si no de sentirte atraída hacia ellas.